JBT ha lanzado un nuevo y revolucionario sistema para el secado rápido de congeladores industriales en espiral después de su limpieza, lo que ayuda a ahorrar horas de tiempo no productivo que se suelen perder intentando -no siempre con éxito- sacar la humedad de los congeladores después de la descongelación.
El LVS QuickDry es una solución innovadora a las dificultades de secado que utiliza un sistema patentado de ciclos de condensación para eliminar rápida y eficazmente todas las gotas de agua de los congeladores en espiral. A diferencia de la mayoría de los sistemas de secado tradicionales, que dependen de ventiladores y pueden tardar una media de dos horas y media en conseguir resultados -lo que conlleva un tiempo de inactividad considerable-, el LVS QuickDry acorta el tiempo de secado efectivo hasta una hora.
El sistema de refrigeración LVS de JBT es una invención patentada que optimiza el sistema de refrigeración reduciendo el consumo de energía, mejorando el rendimiento del congelador en el proceso.
"Cuando los clientes tienen congeladores, el mayor problema -al igual que con los congeladores en casa- es la descongelación y la limpieza", explica Torbjörn Persson, director de flujo de valor y línea global de productos de congeladores en espiral de JBT. "No se puede tener un congelador húmedo después de limpiarlo, así que hay que secarlo y esto puede llevar normalmente varias horas, especialmente con los congeladores en espiral de tamaño medio y grande en los que hay mucho acero. Lo que hace este sistema es que acorta la secuencia de secado hasta una hora".
Soluciones de secado
En un entorno típico de fábrica, donde las condiciones suelen ser húmedas y frías, el secado mediante ventiladores es un proceso lento que puede dejar humedad en el congelador si se intenta acelerar.
"El secado se suele hacer con ventiladores a gran velocidad, como en un lavavajillas", dice Persson. Pero el problema es que, al igual que en un lavavajillas, si no se abre la puerta, nunca se seca del todo porque es difícil eliminar toda la humedad. Y lo que ocurre es que acabas con un congelador muy caliente que tarda mucho en enfriarse y que sigue teniendo mucha humedad".
Dado que el secado suele ocupar un tercio del tiempo total de limpieza cuando se trata de congeladores en espiral, disponer de un congelador seco que vuelva a funcionar lo antes posible es fundamental para evitar el tiempo de inactividad. Sin embargo, con los métodos de secado convencionales, esto no siempre es así.
"Sabemos por nuestra experiencia operativa que muchos clientes secan y siguen sin estar contentos, por lo que tienen que secar durante otra media hora antes de poder empezar a funcionar, porque si tienes un congelador húmedo, el agua puede empezar a congelarse en las piezas móviles causando problemas con la mecánica", dice Persson. "El LVS QuickDry condensa la humedad en el evaporador antes de volver a calentarlo rápidamente con gas caliente, de modo que la humedad que se ha congelado en el evaporador gotea hasta el suelo. De este modo, la mayor parte de la humedad sale del congelador lo antes posible".